sábado, 4 de febrero de 2012

Sueño invernal




Escucho esta canción y veo a la Pávlova bailando en la Plaza Roja, en una noche invernal.

El cielo es un lamento ruso lleno de estrellas.

Anna estira su mano para acariciar el canto de los pájaros nocturnos y sus ojos alcanzan el fondo de Dios.
No hay público pero es la dueña del mundo porque allí están todas las almas.

Cuánta belleza hay en la extrema fragilidad, en el movimiento lento de un cuerpo borracho de música y de nostalgia.

El viento silba en re mayor.


4 comentarios:

  1. Este texto es una belleza, Arantzona, pura delicadeza.

    Me gusta el colorido que le estás dando al blog que estaba muy seriote.

    No te digo nada de los poemas que te dedican y estás poniendo al margen. Hermosísimo.

    Seguimos por todas partes, que no se diga.

    Beso, melocotón vasco.

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  2. Gracias Mimor. Ya he quitado los pelos de primera página jajajjaja. Me hiciste reír con eso.
    El blog lo tenía un poco olvidado, pero me animé al ver lo buenos que son los vuestros. Que no se diga. Los ultraversales al poder.

    Un beso.

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  3. Para mí, este es tu mejor breve, así que ponete en campaña para superaaaarlo. De acá, para arriba.

    Besoooooooooootes.

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  4. Estoy de acuerdo, Lucecita. A ver si capto las magias.

    Un beso, gracias por venirrrrr.

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